El abastecimiento de agua, entendido como un servicio público, puede llevarse a cabo de distintas maneras. Aquí te explicaremos cuáles son los principales métodos que existen. 

Los principales tipos de abastecimiento de agua

Es un hecho que el origen del agua va a influir en los sistemas de abastecimiento. No en vano, no es lo mismo trabajar con agua del mar que hacerlo con agua pluvial o depurada.

Por otra parte, hay que recordar que se puede trabajar con agua potable y agua no potable. El agua potable, generalmente, es aquella que ha sido previamente tratada y que es apta para consumo humano. En cambio, el agua depurada, que se usa para el riego o para la limpieza, no es apta. Y los procesos de tratamiento son distintos, más exhaustivo el primero que el segundo. 

Dicho esto, hay varias maneras de conseguir agua. Estos son los principales tipos de abastecimiento de agua que existen: 

Manantiales

La extracción de agua de manantiales es uno de los sistemas de abastecimiento de agua más sencillos. Básicamente, hay que almacenar o canalizar esa agua que, posteriormente, se distribuirá entre los consumidores, industrias o agricultores. La ventaja es que el agua suele ser muy pura, aunque es un método minoritario, puesto que las necesidades aumentan. 

Sea como fuere, si tienes acceso al manantial y permiso para extraer agua, es relativamente fácil hacerlo. Las canalizaciones y los sistemas de bombeo pueden hacer llegar el agua a determinadas distancias. Lo ideal, en última instancia, es unirlo a una canalización general. 

Agua del mar (desalinización)

La desalinización del agua del mar se ha convertido en una alternativa en zonas con un nivel pluviométrico bajo, como el Mediterráneo. En este caso, lo que se hace es captar directamente el agua del mar y someterla a un proceso de desalinización. El resultado, un agua que será apta para el consumo humano, usos industriales, agrícolas o energéticos. 

Ahora bien, volvemos a lo anterior: el agua de la desalinizadora tiene que llegar a la red de suministro general. Es ahí donde necesitarás tuberías y canalizaciones, arquetas y acopladores, así como sistemas de bombeo. Te podemos ayudar en ese aspecto. 

Extracción de agua subterránea

La extracción de agua subterránea, básicamente de pozos, es uno de los aspectos clave. En este supuesto, lo que se hace es tomar como referencia un sistema de bombeo para que el agua llegue donde tenga que llegar. Esta es una opción que servirá, sobre todo, para viviendas unifamiliares o pequeñas comunidades, porque las cantidades que se consiguen son reducidas.

Captación de agua superficial

La captación de agua superficial es, hoy en día, la principal vía para conseguir agua. Y aquí el protagonista es el embalse, que recoge agua pluvial que, posteriormente, pasará, a través de unas canalizaciones, a la red general. Ahora bien, desde la perspectiva del constructor, lo importante es hacer las canalizaciones correctas con la red general y, así, obtener el agua. 

Conclusión

Cada fórmula de abastecimiento de agua necesita de una infraestructura específica. Y, por esa razón, en Frans Bonhomme disponemos de todo tipo de elementos y accesorios para la captación y conducción de agua potable. ¿Estás preparando una obra o necesitas preparar un sistema de canalización? ¡Llámanos antes!